En el instituto Madison hay un exceso de alumnos. Por eso algunas clases se imparten en el refugio subterráneo que se construyó años atrás. Un día, en medio de la clase, el profesor debe salir un momento. Pero pasa el tiempo y no vuelve, y los alumnos deciden marcharse también. Cuando suben al vestíbulo, no hay nadie. Y lo mismo sucede cuando salen al exterior: Nueva York está absolutamente vacío. Todos deciden alojarse en un hotel y surtirse en tiendas y restaurantes. Poco a poco empiezan a desempeñar distintas funciones dentro de la ‘‘comunidad’‘ y surge un cabecilla: el antiguo delegado de curso, Travis. Éste crea una brigada de ‘‘cuidadores’‘ y censura información a sus compañeros, pues hay pruebas de que unos extraterrestres son los causantes de las desapariciones. En ese momento surge otra ‘‘comunidad’‘, rival de la de Travis, dirigida por otro de los chicos, Jake. Esta ‘‘comunidad’‘ lucha por la búsqueda de la verdad, mientras que los anteriores sólo querían continuar como estaban, sin necesidad de cambiar nada. Tras varios intentos fallidos de cohesión entre las dos comunidades, ambas permanecen separadas en busca de objetivos diferentes.